Tras la detección de mortandad de estas especies en la campiña de Cádiz, se ha realizado un seguimiento y se adoptarán medidas de prevención
(Provincia)Medio Ambiente
La Consejería de Medio Ambiente ha realizado un seguimiento de perdices y faisanes en la provincia de Cádiz tras la detección, por parte de los técnicos del Programa de Vigilancia Epidemiológica de la Fauna Silvestre de Andalucía, de la mortandad de ejemplares de estas especies, entre finales de agosto y la semana pasada en el área cinegética de la campiña de la provincia gaditana. Este seguimiento y los análisis realizados indican que la causa de la muerte de estos ejemplares es una infección vírica, por lo que la Administra-ción andaluza ha elaborado unas recomendaciones que ha enviado a todos los titulares de cotos, junto a la información sobre los resultados obtenidos con los trabajos.
La mortandad se detectó en once cotos, y a pesar de considerarse me-dia o baja dependiendo del coto, se iniciaron los trabajos de toma de mues-tras y analíticas en laboratorios oficiales. Los resultados han permitido esta-blecer que las aves murieron por una infección vírica provocada por un flaviri-rus distinto a West Nile, con complicaciones severas en algunos casos de parasitación y/o infección bacteriana, asociada posiblemente a una alta densidad de estas aves en los cotos y a las condiciones climáticas del mes de septiembre en la zona. Con estos resultados, la Consejería de Medio Ambiente ha enviado a todos los propietarios de cotos de la zona y a los representantes del sector cinegético una circular informativa.
El documento enviado por la Consejería de Medio Ambiente informa so-bre los resultados obtenidos con el seguimiento e incluye una serie de reco-mendaciones preventivas generales de gestión. Las medidas que se recomien-dan son: en primer lugar, dado que la parasitación y/o infección bacteriana tan sólo se producen en aquellas fincas de manejo intensivo con una densidad alta de esta especie, es necesario aplicar medidas de control sanitario de los puntos de alimentación y agua, evitando el estancamiento y la no renovación o circulación de forma regular. Por otra parte, se recomienda una profilaxis basada en la utilización de medidas que minimicen el riesgo de exposición a posibles vectores en las zonas de alto riesgo. Por último, se recuerda la necesidad de extremar las precauciones en cuanto al estado sanitario de los ejemplares de sueltas y/o repoblaciones para evitar la introducción de enfer-medades.
Respecto a los cazadores de la zona, pueden continuar ejerciendo la ac-tividad cinegética con normalidad, manteniéndose las vedas y periodos hábiles de caza establecidos para estas especies en la temporada.
